miércoles, junio 30, 2010

Re-encontrarme.

Mi dedo recorre imaginariamente cada mes del año transcurrido, da la vuelta en el sentido contrario a las manecillas de reloj y asi vuelve el tiempo atrás. Busco con la yema alguna indicación, un punto, una hendidura que me permita comprenderme. En casi un año atrás no me encuentro.

Tuviste ese efecto en mi, el de olvidarme, perderme y fundirme. Diluida en el papel de un calendario que no existe, desaparecí. No quede yo, ni nada.

Ahora es mi tarea la de descubrirme. Saltar una vez más a los días y dejarme ver. Por eso aquí estoy. Ahora sin tí (por que contigo nunca estuve). Estoy para decirlo a quien quiera escucharlo, pero sobre todo para decirmelo más fuerte, para creerlo.

Mis palabras ya no llegan a tus oidos, es verdad.
Mis palabras entonces llegarán a los oídos de quien las quiera, de quien se detenga, sea yo o sea nadie.

Seguiré hablando, no a ti, a mi.
Seguiré escribiendo, no a ti, a mi.
Seguiré caminando, no a ti, a mi.

No más a ti... ahora, a mi.